¿Qué es la barra estabilizadora de la suspensión y cómo influye en la adherencia del vehículo? En el siguiente artículo aclaramos lo esencial del funcionamiento de una de las partes más importantes de la suspensión del automóvil.

Un enlace de la barra estabilizadora dañado es una avería que requiere una reparación urgente.

Un enlace de la barra estabilizadora dañado es una avería que requiere una reparación urgente.

 

Enlace de la barra estabilizadora – ¿qué es?

La barra estabilizadora no es motivo de preocupación para el conductor en el día a día, solo nos acordamos de ella cuando durante una inspección del vehículo nos enteramos de que el enlace de la barra estabilizadora ha sufrido un daño. Los conductores experimentados son capaces de reconocer ellos mismos este problema, que al circular a baja velocidad por una superficie irregular se manifiesta mediante un golpeteo en la zona de la suspensión.

La mayoría de los daños son provocados por el estado de las carreteras. La rueda que cae en un agujero provoca un golpe violento, lo que a su vez rompe en último caso el elemento de goma en el que está acabado el enlace de la barra estabilizadora. También puede notarse que ocurre con mayor frecuencia en el lado derecho del automóvil, lo que se debe a un peor estado de la calzada en la parte del arcén.

La reparación de esta avería no es por lo general ni cara ni complicada. En caso de montar un elemento de una marca conocida el precio no debería superar los cien eslotis. Merece la pena sustituir rápido este elemento, ya que una barra estabilizadora dañada en el automóvil influye negativamente en la seguridad de viaje. ¿Por qué? Intentaremos aclarar esto en la siguiente parte del artículo.

 

La barra estabilizadora de la suspensión ayuda a mantener la trayectoria.

La barra estabilizadora de la suspensión ayuda a mantener la trayectoria.

 

La barra estabilizadora en el automóvil – ¿cómo funciona?

Sobre un automóvil que toma una curva actúa una fuerza centrífuga, por lo que el peso del vehículo es transmitido a la rueda exterior. Esto se ve intensificado por el hecho de que, por el mismo motivo, la rueda interior pierde estabilidad y adherencia y el automóvil se inclina en dirección a la rueda delantera exterior.

 

¿Cómo evitar esto?

Si una mesa tuviera la pata delantera izquierda más corta (de forma análoga al automóvil inclinado en esa dirección) sería inestable. En caso de que no podamos colocar nada debajo de ninguna de sus patas, acortamos la pata opuesta (delantera derecha). La mesa estará inclinada hacia adelante, pero gana estabilidad.

Precisamente de esta forma actúa la barra estabilizadora, que une ambos brazos oscilantes y transmite el movimiento de una parte a la otra. En una situación en la que se levante el brazo oscilante izquierdo se levantará también el derecho.

 

Barra estabilizadora del automóvil – estructura. A menudo sufre una avería el enlace final de la barra estabilizadora.

Barra estabilizadora del automóvil – estructura. A menudo sufre una avería el enlace final de la barra estabilizadora.

 

¿Para qué sirve el enlace de la barra estabilizadora?

El empleo únicamente de una barra estabilizadora delantera tiene sentido en el caso de automóviles conducidos por conductores no experimentados. Esta solución provoca un subviraje del automóvil, pero al mismo tiempo hace que este se comporte de forma neutra en las curvas gracias a una mayor adherencia del eje trasero. Al circular a menor velocidad la barra estabilizadora del brazo oscilante también ayuda a mejorar la reacción a los movimientos del volante.

La situación es diferente en el caso del diseño de un automóvil rápido, que deba tomar curvas a menudo y a gran velocidad. Este automóvil, además de la barra estabilizadora delantera, estará equipado también con una trasera. Esta influye en una mejora de la adherencia de las ruedas delanteras al tomar curvas a gran velocidad, cuando una masa demasiado grande descansa sobre las ruedas traseras.

Durante la utilización del principio de actuación de las barras estabilizadoras un elemento importante es la rigidez de la carrocería. Gracias a ella la masa es transmitida de la parte trasera a la delantera del automóvil y viceversa. Precisamente por ese motivo existe entre los ingenieros una tendencia a diseñar estructuras cada vez más rígidas.

 

Movimiento de la barra estabilizadora de la suspensión

Movimiento de la barra estabilizadora de la suspensión.

 

La barra estabilizadora de la suspensión – ¿cómo influye en la seguridad?

La adherencia es uno de los parámetros más importantes para garantizar la seguridad en la carretera. En atención a ella merece la pena elegir unos neumáticos óptimos. La barra estabilizadora transversal también se encarga de aprovechar de manera uniforme y al máximo la adherencia de todas las ruedas. Aumenta la carga de las diferentes ruedas y la inclinación en las curvas y, por lo tanto, transmite la adherencia a todas las ruedas.

En un automóvil que «sufre» de un enlace de la barra estabilizadora dañado, al tomar las curvas puede aparecer una pérdida de estabilidad y el vehículo puede comportarse de forma imprevisible (a veces el automóvil circulará utilizando la barra estabilizadora y poco después sin ella, debido a la holgura en los enlaces).

 

El funcionamiento de la barra estabilizadora de la suspensión hace que mantengamos la adherencia en las curvas.

El funcionamiento de la barra estabilizadora de la suspensión hace que mantengamos la adherencia en las curvas.

 

Los conductores que modifican sus automóviles cometen a menudo el error de olvidar el importante papel de las barras estabilizadoras. Los conductores que se dedican al tuning aumentan la rigidez de la suspensión mediante amortiguadores y resortes deportivos, aunque no son conscientes de que la barra estabilizadora original no fue diseñada pensando en un uso en tales condiciones. Por ese motivo estará demasiado floja y no transmitirá de forma óptima las fuerzas mayores generadas por la suspensión deportiva. Esto puede influir en un empeoramiento de las características de la conducción. La solución será el uso de un equivalente deportivo de mayor diámetro.