¿En qué condiciones existe el riesgo de que se agriete un neumático? ¿Qué hacer para evitarlo? Por tu propia seguridad, conoce cómo utilizar los neumáticos correctamente y cómo reaccionar en caso de avería En un resumen telegráfico presentamos la información más importante sobre el agrietamiento de los neumáticos.

Reparar un neumático pinchado no siempre es posible. Por ejemplo, un neumático con un pinchazo en el flanco no puede repararse.

Reparar un neumático pinchado no siempre es posible. Por ejemplo, un neumático con un pinchazo en el flanco no puede repararse.

Neumático agrietado – causas

Las causas de este tipo de daño pueden ser muy variadas. De todas las causas posibles, hemos seleccionado las más populares:

  • estiramiento durante la marcha, más probable cuando el neumático no tiene una presión correcta o está sobrecargado,

  • lluvia ácida,

  • influencia del polvo resultante de la frenada (partículas de los discos de freno),

  • sustancias químicas que reaccionan con el caucho,

  • excesiva exposición a la luz solar,

  • cambios frecuentes de temperatura y climatología.

 

El neumático agrietado y la seguridad

La presencia de pequeños surcos no significa que los neumáticos deban ser reemplazados inmediatamente. Las grietas pequeñas pueden tener un carácter cosmético y no son peligrosas. Sin embargo, si atraviesan la superficie exterior de la goma y penetran más profundamente, el neumático puede quedar inutilizado.

Es mejor dejar la valoración de reparar o no un ejemplar específico al vulcanizador. En ocasiones, incluso un parcheado perfecto no puede garantizar la seguridad deseada. En algunos casos, sólo un especialista con conocimientos y experiencia puede valorar si la reparación del neumático sigue siendo posible.

Un neumático agrietado o pinchado en un coche supone un gran problema para el conductor. Por tu propia seguridad y la de los demás, no olvide revisar regularmente los neumáticos de tu vehículo.

Un neumático agrietado o pinchado en un coche supone un gran problema para el conductor. Por tu propia seguridad y la de los demás, no olvide revisar regularmente los neumáticos de tu vehículo.

 

Daños en los flancos
 

La regla generalmente aceptada es que los daños más graves en los flancos de los neumáticos son irreparables. ¿En qué se basa esta afirmación tan categórica? Este tipo de reparaciones no merecen la pena. El pegado lateral de un neumático es una solución muy peligrosa, en esta zona el neumático está sometido a fuerzas tan elevadas que un uso prolongado de un ejemplar encolado podría reventar.

 

¿Qué aumenta el riesgo de aparición de grietas en el neumático?

Los principales factores que aumentan el riesgo de aparición de grietas son:

  • estacionamiento prolongado a la intemperie,

  • abrasiones en los flancos causadas, por ejemplo, por la fricción contra el bordillo,

  • uso excesivo de productos de limpieza y mantenimiento de los neumáticos,

  • largos periodos de estacionamiento,

  • bajo kilometraje.

 

El neumático agrietado y la garantía

La garantía es válida a condición de que el estudio interior del neumático no demuestre que haya sido utilizado de forma no conforme con las normas de uso generalmente aceptadas: esto se aplica en particular a una presión de inflado adecuada, al almacenamiento y a otros aspectos.

Si no es posible reparar el neumático habrá que sustituirlo.

Si no es posible reparar el neumático habrá que sustituirlo.

Prevención del agrietamiento del neumático

Para evitar grietas no deseadas, es necesario tener en cuenta una serie de cuestiones elementales, es decir:

  • comprueba regularmente la presión de los neumáticos

  • no conduzcas con el vehículo sobrecargado.

 

¿A qué pueden conducir las grietas?

Todos los efectos posibles son difíciles de predecir, aunque los más comunes son:

  • la entrada de agua en el neumático, lo que provoca la corrosión de las bandas de acero. En este caso habrá que sustituir el neumático

  • despegado de la banda de rodadura

  • reventón del neumático: en casos extremos, las microfisuras pueden provocar un peligroso reventón de los neumáticos.