Muchos de los coches de turismo y de carga ligeros que circulan por los caminos de Europa no están equipados con el sistema ABS, aunque se puede decir que hasta relativamente poco constituían la vasta mayoría. ¿Tendrá esto algo que ver con los neumáticos? 

En algunas situaciones, sí, y mucho: basta con una frenada brusca y muy fuerte, aún en un camino perfectamente liso y sin ningún impacto contra los bordillos o basura en el camino, para provocar en el neumático un defecto plano.

No hay forma de prevenir este tipo de circunstancias, y pueden ocurrir a cualquier conductor, también aquel que conduce suave y con mucho cuidado, independientemente del tipo de coche, tracción, marca o modelo de neumáticos. Basta con que de repente tengamos que frenar, por ejemplo conduciendo cuesta abajo, al notar en nuestro carril un coche que circula en sentido contrario, o un peatón ebrio en la calle, o cuando un ciclista al voltear gire la bicicleta hacia la izquierda o cuando un coche que se desvía hacia la derecha para que podamos adelantarlo con mayor facilidad, de repente regresa hacia el centro del camino y ya no hay suficiente espacio para rodearlo. Es cuando instintivamente frenamos con todas nuestras fuerzas, y el peso del coche ejerce una fuerte presión sobre el eje delantero del vehículo. Sin un sistema que previene el bloqueo de las ruedas (ABS) es poco probable que los neumáticos no sufran ningún daño.

Y más, la velocidad no tiene que ser alta. Hasta a unos 80-90 km/h (quizás menos) es posible que el frenado no llegue a parar el coche. Es cuestión de fracciones de segundos. Algunos de los conductores creen que son capaces de frenar a golpes de freno y que las ruedas no se bloquearán. Tienen razón: creen (se trata de situaciones extremas de emergencia, cuando oscilamos entre el peligro y la integridad). Por supuesto, este tipo de situaciones no tiene que ocurrir, no obstante puede que cualquiera tenga que enfrentarlas, sin haberlas provocado.

El ABS "salva" los neumáticos en caminos secos

Por lo general se suele resaltar las ventajas del ABS en caminos mojados, donde el sistema facilita rodear el obstáculo. Sin embargo el sistema también es muy útil en caminos secos. Mientras que, en una superficie mojada, una rueda bloqueada no tiene que llevar a la abrasión local de la banda de rodadura, en un camino seco con un frenado de emergencia a 90 km/h, y no necesariamente intencionado para parar el vehículo, el neumático o los neumáticos (por lo general en el eje delantero) ya no se podrán utilizar.
Aún cuando sólo uno de los neumáticos haya sufrido daños, será necesario sustituir dos de ellos. ¿Por qué? Los neumáticos deben ser idénticos por lo menos en un eje, con la misma banda de rodadura y profundidad de surcos. Las diferencias, sobre todo en el tipo de la banda de rodadura, en un camino mojado podrían desatarse en un desastre.
Desde hace ya unos años los vehículos de turismo nuevos salen de fábrica equipados con el sistema ABS, al igual que la mayoría de los automóviles usados fabricados en el siglo XXI. La situación es peor en caso de vehículos de carga ligeros que, aún mucho tiempo después del acceso de Polonia a la Unión Europea, se podían seguir comprando en salones sin el ABS.

Abrasión local en una zona de la banda de rodadura,
efecto del bloqueo de las ruedas.

¿Cómo saber si el neumático sufrió el "defecto plano"?

Se podrá ver, oír y sentir. Los daños mayores se ven a simple vista (falta de surcos en la banda de rodadura en una zona del perímetro – vea la foto), se escucha un sonido parecido al retumbo (más intenso con mayor la velocidad) y se siente en la rueda del volante (golpes, vibraciones, más fuertes con mayor velocidad).

Los daños menores muy a menudo se detectan apenas al equilibrar las ruedas o en una detallada revisión del neumático después de desmontar la rueda. Es mejor dejar en las manos del personal especializado de servicio de neumáticos la decisión sobre una eventual sustitución del neumático (o consultar el caso en otro punto de servicio). Contar con un sistema ABS no garantizará que nuestro neumático no sufra la abrasión, pero la probabilidad de este tipo de daño quedará muy reducida. Bajo la condición de que el sistema funcione.

Si quieres saber más sobre los resultados de desgasto de neumáticos, lee Danos en los neumáticos y las causas de su origen.