Los neumáticos son las piernas de los vehículos, un punto de contacto dinámico con el terreno que, por sus mismas condiciones de trabajo, están sometidos a desgastes continuos. La lista de factores que alteran la durabilidad de los neumáticos, además del inevitable desgaste en la banda de rodadura, es larga e incluye los temidos pinchazos, las deformaciones y otras circunstancias menos visibles como la cristalización.

Debido a que el proceso de cristalización del caucho de los neumáticos no resulta tan evidente, es importante conocer qué es, cómo actúa, cómo afecta a la seguridad del agarre de los neumáticos, el tiempo que tarda en cristalizar un neumático y, lo mejor, qué soluciones están al alcance del conductor para minimizar riesgos.

¿Qué son neumáticos cristalizados?

Los neumáticos están fabricados de caucho, pero, con el tiempo, este material de base que le da la flexibilidad también pierde sus propiedades físicas. La cristalización los vuelve rígidos y su agarre al suelo se resiente.

Los neumáticos de los vehículos no tienen fecha de caducidad, pero pueden deteriorarse por las condiciones a las que estén expuestos.

Los neumáticos se cristalizan porque son viejos, porque han pasado mucho tiempo a la intemperie, porque han sido sometidos a altas temperaturas de manera continuada, porque les ha afectado radiaciones solares intensas durante bastante tiempo y hasta por haber estado en zonas muy húmedas. 

Algunos especialistas también incluyen las conducciones agresivas como un factor extra para la cristalización de los neumáticos.

Uno de los riegos de usar neumáticos cristalizados es el de los reventones. El aire a presión del interior puede expandirse como consecuencia de un uso continuado, la acción de la presión sobre una goma que ha perdido su elasticidad para acomodar las expansiones puede resultar fatal.

Más. Con neumáticos cristalizados, la distancia de frenado aumenta, el consumo de combustible también se incrementa y, en el caso de lluvia, responden mal al denominado aquaplaning.

El aquaplaning es la formación de una estrecha capa de agua entre el neumático y el asfalto por una mala evacuación del agua. En condiciones normales, el paso del neumático sobre un suelo mojado, gracias a la elasticidad del caucho y la misma configuración de la banda, hace que el agua se retire durante el contacto. 

Si se produce aquaplaning, el agua permanece entre el terreno y la banda de rodadura del neumático. El aquaplaning hace que los vehículos se deslicen sobre el suelo, patinen y, en el peor de los casos, se pierda el control por falta de agarre.

¿Cómo saber si un neumático está cristalizado?

Una forma muy sencilla y rápida de saber si un neumático está cristalizado es hundir con algo de presión con una uña de la mano sobre la banda de rodadura. Si el caucho se hunde, se puede decir que está en un estado aceptable, si no se consigue, estamos ante un neumático rígido que puede estar cristalizado. En casos, más serios se pueden ver manchas blancas en la superficie de la banda de rodadura del neumático.

¿Cuánto tarda en cristalizar un neumático?

No existe un tiempo previsible para la cristalización de los neumáticos de un vehículo. Como se ha comentado, todo depende de las condiciones en las que hayan actuado, el entorno en el que se hayan usado. 

Una prueba clara de que las condiciones a las que se someten a los neumáticos es lo que define su cristalización es que pueden quedar fuera de uso. Incluso ruedas que nunca se hayan empleado, pero que por malas condiciones de almacenaje se hayan deteriorado.

Solución

Los neumáticos con cauchos cristalizados son absolutamente irrecuperables. La técnica popular de lijar las bandas de rodadura para eliminar la cristalización en la zona en la que se puede detectar es una práctica absurda, porque el cristalizado suele afectar a todo el neumático en su conjunto. Es más, ese lijado dará lugar, a su vez, a desgastes irregulares y nunca resolverá el problema de fondo.

La única solución para evitar el efecto negativo sobre los neumáticos cristalizados es sustituirlos por unos nuevos. La seguridad en la conducción nunca se puede aplazar y menos parchearla. Eso nunca funciona.

En este sentido, y para sustituir al neumático cristalizado, es importante saber qué tipo de neumático lleva cada vehículo.