¿Te estás preguntando cuando cambiar a neumáticos de verano? Seguro que tienes la sensación de que acabas de cambiar a neumáticos de invierno, pero al mismo tiempo la temporada se acerca a su fin y la nueva se acerca a grandes pasos. El comienzo de la primavera se caracteriza por un tiempo poco estable (al igual que el otoño), por ese motivo aconsejamos cuál es el momento ideal para cambiar de neumáticos y a qué se debe prestar especial atención. Lee nuestro artículo y prepárate para el cambio de neumáticos de temporada.

 

 

¿Cuándo cambiar a neumáticos de verano?

¿Es algo necesario? Si te estás preguntando si merece la pena cambiar a neumáticos de verano, en la siguiente parte de este artículo te ayudaremos a responder a esta pregunta. En este lugar queremos, sin embargo, resolver las dudas de los conductores decididos a cambiar de neumáticos, pero que no están seguros de cuándo es el momento adecuado. Así que, ¿cuándo cambiar los neumáticos de invierno por unos de verano?

En general se acepta que se deben colocar neumáticos de verano cuando la temperatura media diaria es superior a 7°C. Por desgracia, estas indicaciones son difíciles de encuadrar en un marco temporal debido a la variabilidad del tiempo entre el invierno y la primavera. Precisamente por ese motivo no recomendamos cambiar los neumáticos por unos de verano justo tras los primeros días con una temperatura por encima de 7°C. Espera a que el tiempo se estabilice y solo entonces dirígete al taller para montar unos neumáticos nuevos.

 

 

Ya sabes que aquí las prisas no son recomendables. ¿Pero cómo es en el caso de los neumáticos de invierno?

 

¿Cuándo cambiar a neumáticos de invierno?

Seguimos basándonos en los principios que hacían  referencia al cambio a neumáticos de verano y valores límite marcados por los termómetros. De igual forma, deberíamos colocar los neumáticos de invierno cuando la temperatura caiga por debajo de 7°C. Sin embargo, en esta estación cambia la dinámica de reacción a las condiciones atmosféricas y no merece la pena esperar a las primeras nieves y el frío. Por lo tanto, no pensemos demasiado tiempo cuándo cambiar a neumáticos de invierno y no nos dejemos sorprender por las condiciones en la carretera.

 

 

El límite adoptado de 7°C parece ser aquí el principal indicador del momento ideal para el cambio de neumáticos de temporada. Sin embargo, los más indagadores pueden preguntarse por qué. Para hablar con fundamento, preguntamos a un experto de la empresa Continental qué piensa sobre esto:

 

¿Es el límite de los 7 grados un indicador fiable del momento para el cambio de neumáticos?


Cuando la temperatura media diaria cae por debajo de 7 grados Celsius merece la pena pensar en cambiar los neumáticos de verano por unos de invierno. Por debajo de esa temperatura el compuesto de goma de los neumáticos de verano comienza a endurecerse de forma súbita, lo que provoca que los neumáticos pierdan sus propiedades y dejen de garantizar los parámetros establecidos por el fabricante de estos. Aquí se comportan idealmente los neumáticos de invierno con un compuesto de goma que, incluso a grandes temperaturas negativas, sea blando y elástico. Además de la mencionada temperatura límite de 7 grados, merece también la pena prestar atención al momento del día en el que nos desplazamos más frecuentemente con el vehículo. La temperatura media diaria es la media de la temperatura más baja durante la noche y la temperatura más alta durante el día. Sin embargo, si nos desplazamos principalmente de noche o por la mañana, merece la pena cambiar los neumáticos antes, ya que nuestra temperatura media diaria es notablemente más baja.

 

Paweł Skrobisz   
Jefe del Departamento Técnico

 

En este lugar también merece la pena recordar que algunos países han introducido la obligación de utilizar neumáticos de invierno  para garantizar la seguridad de viaje de sus ciudadanos y minimizar el riesgo de accidentes.

Nos parece que los conductores no necesitan este tipo de reglamentos, ya que se caracterizan por un nivel suficientemente alto de concienciación y responsabilidad.

 

Precisamente de esta forma llegamos a la respuesta a la pregunta de si merece la pena cambiar a neumáticos de invierno... ¿pero merece la pena cambiar a neumáticos de verano? En nuestra opinión sí, ya que son completamente diferentes a los de invierno.

 

Diferencias entre los neumáticos de verano y los de invierno

Composición del compuesto de goma

La diferencia fundamental entre los neumáticos de verano y los de invierno es el compuesto de goma con el que han sido fabricados. El material utilizado para la construcción de los neumáticos de verano está adaptado para trabajar a temperaturas por encima de 7°C y en estas condiciones garantiza todas sus prestaciones. Cuando la temperatura cae por debajo de este umbral los neumáticos de verano se endurecen y, por lo tanto, pierden sus propiedades. En el caso de los neumáticos de invierno ocurre al revés. El mayor contenido de sílice hace que por debajo de 7°C adquieran unas propiedades óptimas. A temperaturas más altas los neumáticos de invierno empiezan a sobrecalentarse y esto favorece su desgaste más rápido. El compuesto empleado en los neumáticos de invierno tampoco cumple sus funciones en verano: no garantiza la adherencia ni un frenado seguro sobre un pavimento seco ni mojado.

 

Los neumáticos de verano se diferencian considerablemente de los de invierno.

Los neumáticos de verano se diferencian considerablemente de los de invierno.

 

Dibujo de la banda de rodadura

Otra diferencia entre los neumáticos de verano y los de invierno es el dibujo de la banda de rodadura. Los diseñadores de la estructura prestan aquí especial atención a las diferentes funciones de los neumáticos, adaptándolos a una estación concreta. La banda de rodadura de un neumático de invierno está equipada con un mayor número de incisiones (llamadas láminas), que están dibujadas de forma más marcada que en los neumáticos de verano. Los surcos centrales son más profundos, gracias a lo cual evacuan eficazmente la nieve y el barro de debajo del neumático. Esto permite mantener una adherencia adecuada en condiciones invernales, pero reduce considerablemente el nivel de prestaciones de los neumáticos de invierno en condiciones estivales. La banda de rodadura de un neumático de verano es mucho más lisa, por lo que la superficie de contacto del neumático con el pavimento es mayor. Gracias a esta estructura la maniobrabilidad en una calzada seca es mejor y la distancia de frenado más corta. Las incisiones son diseñadas de forma que evacuen el agua (no el barro y la nieve) los días de lluvia y eviten el fenómeno del aquaplaning.

 

¿Los neumáticos para todo el año como una alternativa económica a los de temporada?

Las diferencias en la estructura y la composición de los neumáticos dedicados a una temporada concreta nos garantizan unas propiedades totalmente diferentes en función de las condiciones atmosféricas reinantes. ¿Cómo quedan en comparación con ellos los neumáticos para todo el año? ¿Es una alternativa a la que prestar atención?

También nos ayudó a responder a esta pregunta el experto de Continental:

 

Los neumáticos para todo el año indudablemente ahorran tiempo y dinero a los conductores, ¿pero seguro que pueden garantizar lo mismo que un neumático dedicado a una temporada concreta?


Los neumáticos para todo el año siempre supondrán un cierto compromiso. No es posible crear unos neumáticos que se comporten de forma ideal tanto a +30 grados Celsius en verano como a -20 grados Celsius en invierno. Por ese motivo la empresa Continental también opina que en verano se deberían utilizar neumáticos de verano y en invierno neumáticos de invierno, ya que solo esta solución garantiza una seguridad óptima en cualesquiera condiciones en la carretera. Los neumáticos para todo el año pueden ser una buena solución si el vehículo es utilizado principalmente en ciudad (donde las carreteras están mantenidas en buen estado incluso en invierno) y si el vehículo hace recorridos pequeños, por ejemplo, si es utilizado como segundo vehículo en una familia, para ir al trabajo o al colegio.

 

Paweł Skrobisz   
Jefe del Departamento Técnico

 

Ya sabemos que merece la pena, también sabemos cuándo cambiar los neumáticos por unos nuevos... ¿A qué más merece prestar atención?

 

¿A qué prestar atención al cambiar los neumáticos?

1. Profundidad de la banda de rodadura y estado general del neumático

Antes del cambio a neumáticos de verano se debe prestar atención al estado de nuestros neumáticos. Es esencial la profundidad de la banda de rodadura: la ley permite la circulación con neumáticos con una profundidad de la banda de rodadura mayor o igual a 1,6 mm. Estos son valores límite que, sin embargo, no garantizan una seguridad completa en la carretera. Un neumático de verano con una banda de rodadura con una profundidad de menos de 3,0 mm pierde sus parámetros de tracción, especialmente en una carretera mojada. Los neumáticos de invierno, a pesar de la ausencia de consecuencias legales, deben cambiarse cuando la banda de rodadura tiene una profundidad inferior a los 4 mm.

Antes de montar los neumáticos también comprobamos que no hay daños en los flancos y en la banda de rodadura. En caso de dudas debemos preguntar al mecánico.

 

2. Almacenamiento y equilibrado correctos de los neumáticos

Si los neumáticos han estado guardados en un garaje debemos recordar su equilibrado. Un equilibrado de los neumáticos incorrecto influye muy negativamente sobre el funcionamiento de la suspensión y puede provocar que el automóvil no mantenga la trayectoria. También ayuda a un desgaste irregular los neumáticos y, por lo tanto, a una pérdida más rápida de sus propiedades.

 

3. Control de la presión

El último punto, aunque muy importante, es el control de la presión en los neumáticos. Por lo general la presión disminuye debido al proceso natural de «respiración» de la goma, así como a causa de la falta de estanqueidad de la válvula. Una presión más baja que la recomendada por el fabricante puede provocar un empeoramiento de las propiedades de tracción del neumático, de la reacción en las curvas, del frenado, además de aumentar la resistencia a la rodadura y, por lo tanto, el consumo de combustible por el automóvil. Si no sabes qué presión en los neumáticos está recomendada para tu automóvil, utiliza nuestra tabla de presiones.

 

El cambio de neumáticos de temporada te ayudará a mantener la seguridad y la comodidad de viaje.

El cambio de neumáticos de temporada te ayudará a mantener la seguridad y la comodidad de viaje.

 

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